Vayeji

Mijal Bitton, @X, 28 de diciembre de 2023

Hace unos años, me di cuenta que una teoría en Sociología que utilicé en mi investigación me permitía releer la historia de José y sus hermanos. La teoría es la de la «Reposición Étnica» desarrollada por el profesor de Stanford, Tomás Jiménez. Jiménez sostiene que la migración continua de mexicanos a los Estados Unidos aporta recursos étnicos (idioma, cultura, identidad) para dar forma a los descendientes de generaciones anteriores de inmigrantes mexicanos.

Por ejemplo: la bisnieta de un inmigrante mexicano puede que no hable español ni haya estado en México. Pero si su nuevo compañero de clase es un inmigrante mexicano, interactuar con él fortalecerá su identificación como mexicanoamericana. Los inmigrantes aportan recursos étnicos y culturales que pueden actuar como «impulsores» de la identidad étnica para dar forma a aquellos que vinieron del país de origen mucho antes y que están casi asimilados.

He utilizado esta teoría en mi propia investigación sobre la comunidad judía siria en Nueva York. Argumenté que ésta experimentó una ‘reposición étnica’ al dar la bienvenida a inmigrantes judíos de MENA a lo largo de un siglo. En otras palabras, la persistencia de la identidad judía de Oriente Medio de esta comunidad se debe en gran medida al flujo constante de inmigrantes.

Lo que me lleva a José y sus hermanos. Leemos este Shabat la porción de la Torá de Vayeji, la última en el libro del Éxodo. Cuando era más joven, solía ver la formación de la familia de Jacob en Egipto como moldeada por las acciones de José. Él salva a su familia y al pacto al alimentarlos durante una hambruna y darles su protección.

Pero hace unos años, me di cuenta de algo bastante obvio (¡pero no siempre evidente si creciste aprendiendo la Biblia cada año y no considerando historias alternativas!). Si los hijos de Jacob no hubieran bajado a Egipto, José se habría perdido. No físicamente, pero sí en la historia judía y en la identidad judía y en el pacto judío. Ya estaba asimilado con un nombre egipcio y una familia egipcia. La interpretación de Leon Kass de José me ayudó a considerarlo como alguien que potencialmente se había asimilado casi por completo como un gobernante egipcio.

Aquí es donde entra la teoría de Jiménez. Cuando los hermanos bajaron a Egipto, no solo obtuvieron alimentos y recursos materiales de José. A su vez, lo moldearon (y salvaron) a través de un proceso de reposición étnica. Le recordaron su identidad: quién era, quién es y quién podría ser. Contrarrestaron su asimilación recordándole Canaán y el pacto de sus ancestros. Esta es la belleza de la reunificación de la familia de Jacob en Egipto. José salva a sus hermanos materialmente, y ellos lo salvan como parte integral del pacto; ninguno de los dos actos estaba garantizado históricamente.

He estado pensando mucho en esto. Ha habido mucha oscuridad en comunidades desde el 7 de octubre. Pero también mucha luz. Y una de las luces más potentes ha sido una versión de reposición étnica bajo una forma digital.

He visto la fuerza de la colectividad judía y la identidad étnica y la solidaridad y el orgullo judíos despertarse en judíos de todo el mundo. No solo por la barbarie de Hamás y el aumento del antisemitismo. Sino porque nuestro pueblo en Israel se ha levantado con valentía, resistencia, unidad y un espíritu de sacrificio.

Nos están recordando a todos lo que significa ser parte del pacto y lo que significa vivir una vida de propósito y enfrentarse al mal. Están fortaleciendo nuestra identidad judía de maneras increíblemente poderosas. Nos están recordando nuestro lugar en el pacto de la misma manera que los hermanos de José le recordaron el suyo.

Traducción editada por Ianai Silberstein