Desnazificar

de un tweet en inglés de Einat Wilf, PhD, @EinatWilf, del 12 de octubre de 2023

Décadas después de la masacre de atletas israelíes en los Juegos Olímpicos de Múnich en 1972, uno de los perpetradores que aún estaba vivo afirmó estar profundamente orgulloso de sus acciones, argumentando que «llamó la atención mundial hacia la causa palestina». ¿Qué han hecho los palestinos desde entonces con esta atención global a su aclamada «causa»?

Si su causa se hubiera limitado a objetivos como «poner fin a la ocupación», «retirar asentamientos» o «crear un estado independiente», la habrían logrado hace mucho tiempo. Pero su causa siempre ha sido y sigue siendo asegurarse de que los judíos no tengan un estado en ninguna parte de la tierra; de ahí las expresiones: «Palestina Libre» y «Del Río al Mar».

Los palestinos nunca han perseguido una causa constructiva, ni siquiera por un solo minuto. Siempre ha sido destructiva, razón por la cual han fracasado en alcanzarla. Un pueblo que prioriza como su objetivo principal la destrucción de todo lo que otro pueblo construyó nunca logrará construir algo valioso.

Esta es la razón por la cual cuando los palestinos celebran masacres de judíos, celebran la idea de que Israel pronto desaparecerá y de que no habrá judíos libres viviendo en esa tierra. No celebran nada positivo que deseen lograr.

Si algo debe cambiar después de este infierno viviente, no es solo desmantelar a Hamas o destruir su capacidad para llevar a cabo tales masacres, sino desmantelar el conjunto de la ética palestina en su totalidad. Los palestinos y quienes les apoyan deben someterse al mismo proceso de desnazificación que vivió Alemania o la reprogramación de la cultura militar de Japón. Nada menos de eso servirá.

Traducción adaptada y ajustada: Ianai Silberstein