Las 20 razones principales por las que los izquierdistas estamos perdiendo la batalla por Israel
Mientras que los derechistas están por ahí, manifestándose, construyendo y haciendo alboroto, nosotros los zurditos estamos ocupados con el yoga y los Pilates.
1. Porque la derecha acorraló todo el asunto, la causa y el efecto, el huevo y la gallina, completamente todo. Primero se lamenta de que Israel no tenga socios, luego se asegura de socavar a los que sí lo son; primero construye asentamientos y causa hechos irreversibles sobre el terreno, luego declara el fin de la solución de dos estados. Es una trampa perfecta.
2. Porque el ala derecha es un proveedor de servicios sin fallas mientras que la izquierda se rige por el lema contrario: el problema no es tuyo, es nuestro. Cuanto más de derecha te hagas, más son los demás y no tú los responsables del lío en el que estamos metidos; pero cuanto más te vayas para la izquierda, eres tú solo, más que los demás, el que tiene la culpa. Si a uno le dan para elegir entre aquellos que desde la mañana hasta la noche señalan con el dedo y aquellos que te dicen lo virtuoso y noble que eres, no es de extrañar que la mayoría de la gente prefiera esto último y opte por que lo halaguen.
3. Porque la derecha, sin importar lo que haga, es siempre la víctima con la que son injustos, mientras que la izquierda se siente culpable incluso cuando Israel se comporta de la mejora manera. Porque la derecha tiene las anteojeras puestas a la hora de ver cuáles son las transgresiones que cometió Israel, mientras que la izquierda suele fijarse en ellas a través de un microscopio que las muestra 500 veces más grandes.
4. Porque los derechistas están a la ofensiva total y en modo de perpetuo ataque contra sus enemigos, los reales y los imaginados, sobre todos los de izquierda, lo cual la deja a la izquierda tratando de esquivar el fuego y desesperándose por encontrar un refugio.
5. Porque los derechistas nunca reconocen los errores que cometen, nunca se disculpan por nada, nunca le conceden ni siquiera un punto al otro bando. ¿Recuerdan a todos los derechistas que "demostraron" que era una farsa de "Pallywood" los videos que se filmaron cerca de Ramala, los cuales mostraban el asesinato de dos adolescentes palestinos? ¿Acaso ustedes recibieron las disculpas del caso? Yo tampoco las recibí.
6. Porque la derecha es estrecha de miras y se centra en un tema solamente, mientras que la izquierda parece creer por algún motivo que hay otras causas en el mundo que valen la pena además del Estado judío y la procreación de su pueblo.
7. Porque los derechistas no tienen matices. Tienen una mentalidad bien definida, que todo se tiene que resolver a la vez, que todo es "blanco o negro", que "estás en contra de nosotros o a favor de nosotros", mientras que los izquierdistas viven en un mundo complejo de por lo menos 50 tonos de grises. El viejo chiste de la hasbará de que "Israel es bueno y los árabes son malos" se convirtió en el dogma del ala derecha, mientras que los zurditos siguen tratando de dilucidar, para empezar, dónde están ubicados.
8. Porque los derechistas que donan colocan su dinero donde pueden expresarse, mientras que los izquierdistas o bien esparcen su riqueza para una miríada de causas o bien prefieren mantenerse totalmente fuera del candelero. Porque incluso cuando se tiene a alguien como Jaim Saban sirviendo como un contrapeso supuestamente izquierdista de Sheldon Adelson, tal como lo hizo en la reunión del Israeli American Council, que tuvo lugar recientemente en Washington, resulta que no le gusta mucho la forma en que Obama ha lidiado con los palestinos y su política con respecto a Irán es la de "acabar con bombas a los hijos de puta".
9. Porque el ala derecha se las ingenió para encontrar una forma de deslegitimar las miserables donaciones que hicieron "los gobiernos extranjeros" a las ONG izquierdistas a la vez que construyeron vías rápidas independientes para que fluyan libremente los incalculables millones de dólares provenientes de los evangelistas de los Últimos Días, de los entusiastas que quieren que se construya un tercer Templo de Jerusalén y de los multimillonarios que apoyan con las transferencias de dinero que realizan. A los primeros, que de todos modos no hacen la diferencia, se los considera que son renegados y traidores, mientras que los últimos, quienes podrían detonar continentes enteros, constituyen el orgullo judeo-patriótico personificado.
10. Porque, cuando el ala derecha se queda sin argumentos convincentes, siempre puede recurrir a su dios que siempre tiene sentido y a los comodines de la ortodoxia intransigente. La izquierda, aun cuando consigue que se pongan de su lado algunos rabinos para respaldarla, suelen provenir de denominaciones en las que todo es negociable y debatible.
11. Porque la derecha reescribe la historia, exagera su rol y hace polvo todo lo que haya hecho la izquierda, y esta hace exactamente lo mismo, pero no viceversa.
12. Porque sin importar lo derechista que te hagas, desde volar el templo hasta asesinar a un primer ministro, puede que seas una "maleza" pero sigues estando en el "campo nacional". Pero si eres de izquierda, tienes que andar con cuidado para no caerte del borde, desde el sionismo liberal hasta el no-sionismo, hasta el post-sionismo y hasta el anti-sionismo, y hasta enemigo del Estado. E incluso si te quedas inmóvil en el mismo lugar, la derecha va a ir cambiándote las reglas del juego para que te conviertas, sea como sea, en algo que no querías ser.
13. Porque a menudo la izquierda está mucho más obsesionada con sus propias divisiones internas que con dominar el mundo exterior.
14. Porque el odio es muchísimo más efectivo como propulsor y muchísimo menos cansador que esforzarse por entender al otro, desconsiderando el sentir empatía con él.
15. Porque, siendo honestos, el otro bando tiene sus propios derechistas, o los equivalentes de eso, quienes corroborarán las más graves predicciones que haga el ala derecha, y viceversa. Es un tipo de simbiosis que se conoce como sinecrosis, la cual, señala Wikipedia, es "perjudicial para los dos organismos involucrados y termina provocando la muerte".
16. Porque la izquierda siempre siente atracción por vivir en otras democracias liberales, mientras que el ala derecha siente que su espalda da para el muro sin haber otro lugar adonde ir.
17. Porque la derecha siempre va hacia adelante y no se queda con las ganas de decir las cosas, y nunca mira hacia atrás, mientras que la izquierda se mira fijamente en el ombligo, se mira el hombro y se queda largo rato pensando en qué fue lo que no salió tan bien.
18. Porque mientras que la izquierda hace meditación, yoga, gimnasia, Pilates y bicicleta fija, los derechistas están por ahí manifestándose, construyendo o creando alboroto, realmente haciendo algo tangible por su causa.
19. Porque la derecha escucha una sola fuente de noticias y le cree al peor de sus enemigos, mientras que la izquierda suele sufrir de sobredosis sensorial y de demasiada información.
20. Porque, siendo honestos, la mayoría de los derechistas son carnívoros que se comen la carne, mientras que los izquierdistas se hicieron veganos, vegetarianos, comen cosas sin gluten y macrobióticas y se convirtieron en gastrónomos alérgicos al maní. Así que por lo general solo tiene que pasar un poco de tiempo para que se los devoren.
Fuente: Haaretz.com
Traducción al español: Rodrigo Varscher