Diálogo entre israelíes y palestinos: Por qué la visión oscura de Netanyahu nubla la posibilidad de paz

bibi2okCarlo Strenger dice que Netanyahu cree que Israel está en el medio de un choque de civilizaciones entre el Occidente y el Islam.
Aunque muchos están impresionados por el entusiasmo de John Kerry para lograr que los israelíes y los palestinos vuelvan a negociar, la mayoría no creen que sea posible un acuerdo. Una razón para este pesimismo es la visión global de Benjamin Netanyahu, la cual mantuvo consistente desde los ochenta.

 Netanyahu cree que Israel está en el medio de un choque de civilizaciones entre el Occidente y el Islam, y que el mundo árabe no reconoce ni está de acuerdo con la existencia de Israel. Él piensa que la concentración de la comunidad internacional en el conflicto árabe-israelí está mal enfocada.

Netanyahu también cree que volver a las fronteras de 1967 no solucionaría el problema. Israel va a seguir estando rodeado por una civilización que busca a la larga eliminarlo, él piensa, pero perderá profundidad estratégica y estará expuesto a ataques de cohetes en las ciudades donde se centra la población.

El Primer Ministro de Israel es un hombre con una visión global oscura que está guiada por sus miedos y sospechas. No todos sus miedos pueden ser considerados simple paranoia; algunos de ellos están, de hecho, basados en precedentes históricos y han sido corroborados hasta cierto punto por eventos recientes.

Mientras que el mundo Occidental se ha concentrado en la matanza que Bashar al-Assad causó en la población de Siria, muchas veces se ignora que muchos de los rebeldes son jihadistas fundamentalistas, y que Israel se encontraría en una situación muy difícil si estos grupos ganaran el control de la frontera entre Siria e Israel. Otros jihadistas radicales se infiltraron en el Sinai y atacaron Israel durante el último año.

La verdadera pesadilla de Israel es que Jordán pueda caer. Si los jihadistas fortalecen su presencia en Cisjordania, es posible que el territorio caiga en las manos de Hamas. Israel podría ser atacado con cohetes ubicados a menos de veinte kilómetros de los centros de población cercanos a Tel Aviv – cohetes que ya fueron usados para atacar a Israel desde Gaza y Líbano.

Si esta es la visión de Netanyahu, ¿debemos esperar que los palestinos en cierto punto abandonen las negociaciones, supuestamente porque Israel continua construyendo nuevos asentamientos? ¿Estos diálogos buscan únicamente satisfacer a Estados Unidos?

Hay razones para pensar que Netanyahu se dio cuenta de que la ocupación de Cisjordania no es conveniente para Israel a la larga. Las instrucciones de la Unión Europea que prohíben cualquier cooperación con organizaciones y compañías israelíes de Cisjordania abre la posibilidad de que haya otras sanciones contra Israel.

La UE financia las investigaciones israelíes y es con quien más comercia Israel. Antes de que estas instrucciones fueran publicadas, Netanyahu se juntó con una delegaciones de comerciantes israelíes, algunos de ellos amigos suyos, que le advirtieron de las consecuencias económicas de la ocupación de Cisjordania. Netanyahu probablemente alcanzó la conclusión de que la economía de Israel no puede seguir floreciente si Israel continúa con la ocupación.

También están apareciendo problemas con Estados Unidos. Netanyahu piensa que entiende a Estados Unidos perfectamente – que las elites liberales de las costas Este y Oeste no representan al Estados Unidos verdadero, y que el corazón del país va a apoyar a Israel pase lo que pase. También creía que podía manipular la opinión política estadounidense y asegurarse de que los intereses de Israel permanecerían a salvo.

Sin embargo, la sabiduría de Netanyahu recibió un duro golpe. Su gurú político, Arthur Finkelstein, le había asegurado que Mitt Romney iba a derrotar a Barack Obama en las elecciones del 2012, lo cual obviamente era incorrecto.

El establecimiento de seguridad de Estados Unidos también le advirtió numerosas veces que la ocupación israelí de Cisjordania es una desventaja estratégica, porque se ha convertido en un símbolo de las quejas del mundo islámico hacia el Occidente. Terminar con el conflicto israelí-palestino es, entonces, un interés estratégico de suma importancia para Estados Unidos.

¿Esto significa que los próximos nueve meses llevarán a un acuerdo de paz con los palestinos? Me gustaría pensar que sí, porque creo que la solución de dos estados es vital para el interés político, estratégico y moral de Israel, pero soy pesimista.

A Netanyahu le falta una base política para lograr un acuerdo de paz. Su partido Likud se ha movido significativamente hacia la derecha y la mayoría de sus miembros de la Knesset se oponen a un estado palestino.

Además, un acuerdo con los palestinos requeriría sacar a entre ochenta y cien mil personas de sus hogares en los asentamientos. Muchos israelíes ven a las personas que viven en los asentamientos como los verdaderos sionistas de la actualidad. Netanyahu no puede confrontase a ellos porque en el fondo se identifica con su causa.


Aparte de estos desafíos, está el hecho de que Netanyahu evita los riesgos – otro factor que disminuye las chances de la paz inminente.

Fuente: CNN

Traductora: Mariel Benedykt

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