«Brexit» y la unificación de la especie.

Yuval Noah Harari, The Guardian, 21 de mayo de 2018

El nuevo libro del exitoso historiador argumenta que los desafíos globales harán que las naciones sean cada vez más interdependientes. El Brexit podría ser una simple sacudida en el camino hacia la “unificación humana”, según un nuevo libro del exitoso historiador Yuval Noah Harari, que advierte a los políticos que no se distraigan con el aumento del nacionalismo en el mundo. El académico israelí, cuyo primer libro, Sapiens, se convirtió en una sorpresiva sensación editorial al cartografiar el ascenso de la especie humana, dirige por primera vez su atención hacia temas de actualidad con un ataque a lo que argumenta que es una respuesta miope a los desafíos globales por parte de países como el Reino Unido, Estados Unidos, Rusia e Israel.

“El Brexit bien puede iniciar la desintegración simultánea del Reino Unido y de la Unión Europea. Pero en el largo plazo, la dirección histórica es clara”, escribe. “En las últimas generaciones, las pocas civilizaciones que quedan se han estado fusionando en una sola civilización global”.

El nuevo libro, “21 lessons for the 21st Century” (21 lecciones para el siglo XXI), será publicado en agosto y llega en medio de un período de introspección sin precedentes en la política británica sobre cómo abandonar la Unión Europea. Sin embargo, Harari argumenta que los próximos desafíos del calentamiento global, las alteraciones causadas por la tecnología y la proliferación nuclear nos harán “cada vez más interdependientes” y con necesidad de proyectos cooperativos como la Unión Europea. “En un siglo diferente y en una situación diferente, no creo que haya nada necesariamente erróneo en el Brexit”, agregó en una entrevista. “Si quieres ser un país completamente independiente y no formar parte de una organización más grande, está bien. El problema es que ante el tipo de desafíos al que nos enfrentamos hoy en día, los costos de oportunidad de estar muy absorto en uno mismo se vuelven más y más altos todo el tiempo”.

La tesis podrá enfurecer a los partidarios del Brexit que lo consideran una forma de que Gran Bretaña tenga mayor acceso directo al mundo, pero Harari también tiene palabras de crítica para los liberales que consideran el referéndum de pertenencia a la Unión Europea como una catástrofe. “Como una persona que piensa que un fuerte dolor de cabeza significa un tumor cerebral terminal, muchos liberales temen que el Brexit y el ascenso de Donald Trump estén presagiando el fin de la civilización humana”, escribe. “El primer paso es atenuar las profecías de desgracia y pasar del modo de pánico al de desconcierto… ser más humildes y, por lo tanto, tener una visión más clara”. También afirma que no es inevitable que la humanidad aprenda a colaborar más, advirtiendo de una posible “desintegración” de la Unión Europea a raíz del Brexit, con implicaciones preocupantes.

“Si el proyecto europeo falla… esto indicaría que la creencia en los valores liberales de libertad y tolerancia no es suficiente para resolver los conflictos culturales del mundo”, escribe Harari. “Si los griegos y los alemanes no pueden ponerse de acuerdo sobre un destino común, y si 500 millones de europeos prósperos no pueden absorber unos pocos millones de refugiados empobrecidos, ¿qué posibilidades tenemos los humanos de superar los conflictos mucho más profundos que aquejan a nuestra civilización global?” “Digamos que el aumento de la inteligencia artificial altera por completo el mercado laboral mundial: esto creará desafíos sociales y económicos mucho más grandes que la inmigración de unos pocos millones de personas a la Unión Europea o de algunos trabajadores de Polonia y Rumania al Reino Unido”, agregó.

Harari, quien es profesor de la Universidad Hebrea de Jerusalem, también criticó el nacionalismo israelí a raíz del asesinato de manifestantes palestinos la semana pasada. “Si cada nación piensa en sí misma, ¿quién está pensando en los problemas globales?”, dijo. “No veo que Israel esté haciendo una contribución significativa para enfrentar los principales desafíos de la humanidad”.

Pero el libro señala a la Unión Europea como un modelo de cómo se pueden equilibrar los intereses nacionales y qué está en juego si esto falla. “Después de siglos de terrible derramamiento de sangre, franceses, alemanes, italianos y británicos finalmente construyeron un mecanismo que garantiza la armonía continental, sólo para que el público británico ponga palos en la rueda de la máquina milagrosa”, escribe Harari. “Tenemos una ecología global, una economía global y una ciencia global, pero todavía estamos atrapados en tener únicamente una política nacional”, agrega. “Para tener una política eficaz, o desglobalizamos la ecología, la economía o los avances de la ciencia, o globalizamos nuestra política”.

Traducción: Daniel Rosenthal