Bamidbar
Este Shabat hemos comenzado a leer el cuarto libro de la Torá (el Pentateuco), Bamidbar (“en el desierto”) o “Números”. El título original en hebreo y la traducción al griego son, en todo caso, complementarios: el drama se desarrolla en el desierto pero trata de censos. Saber cuántos somos y saber quiénes somos: también abundan los nombres propios. Al punto que de las diez porciones semanales, tres son nombradas por un personaje concreto: Koraj, Balak, y Pinjas. En suma: no sólo cada uno cuenta, también cuenta quién eres. No es lo mismo uno que otro.
Bamidbar es una suerte de preparación para la eventual entrada y conquista de la Tierra de Canaán: saber con cuántos y con quiénes contamos. No por nada una de las porciones más importantes de este libro, Shlaj-Leja, trata sobre los doce “espías” o enviados a informar sobre la realidad en el terreno. Diez traen una versión pesimista, dos traen una versión optimista. Nadie recuerda el nombre de los diez pesimistas, pero todos recordamos a Caleb ben Iefuné y a Iehoshua Bin Nun que defienden con fe la promesa divina.
Al tiempo que escribo esto amanecemos con la noticia de la liberación por parte del Ejército de Defensa de Israel de cuatro rehenes vivos, sanos, y enteros. En términos bíblicos, esta sería la versión de los dos espías “optimistas” que traen con ellos las vides. La de los diez “derrotistas” queda postergada; nadie puede ignorar un happy-ending. Sin embargo, parafraseando el texto, la tierra sigue devorando a sus habitantes. Aunque traigamos gigantescos racimos de uva al hombro. Acaba de morir el comandante de la operación Arnon Zamora Z’L, como murió Ioni Netanyahu en Entebe en 1976. Por cada tantas vidas rescatadas, alguien paga el precio con la suya.
Bamidbar es también el libro de las traiciones, las maldiciones, y el fanatismo: Koraj, Balak, y Pinjas respectivamente. No es un libro para pasar por alto a pesar de sus extensos listados de nombres y su repetitiva estructura literaria. Está lleno de episodios tan antiguos como actuales. El libro cierra con “Masei”, un resumen del recorrido de los Hijos de Israel desde la salida de Egipto. Al Shabat siguiente comenzará el último libro de los cinco libros revelados, Devarim (Deuteronomio): palabras, conceptos, relato.
Nunca fue tan relevante tener en mente, todo el tiempo, estos puntos con los que la Torá nos desafía:
- Saber quiénes y cuántos somos
- Saber quiénes ambicionan poder por el poder mismo
- Saber quién nos odia
- Conocer a los fanáticos
- Reconocer las dificultades sin perder la confianza
- Repasar el camino recorrido
- Volver a escuchar nuestro propio relato.
Como dice un dicho muy repetido, ajeno a las fuentes judías pero irresistiblemente relevante hoy: mantengamos la calma y volvamos a lo básico. Después de todo, está todo escrito.